Andacollo: Rechazan mayor aporte del royalty para zonas mineras (el patetico doble discurso del Gobierno, ya estamos fritos)

Autoridades señalaron que los impuestos, como este tributo específico, no le son exclusivos a una única localidad, sino que le pertenecen a todos los chilenos.

David Pavez Torrealba

La Serena

Los municipios mineros del país y en especial los de la Región de Coquimbo están iniciando una campaña para que las empresas mineras le entreguen un mayor aporte a través del royalty, un impuesto creado como compensación al impacto ambiental que estas compañías producen. Pese a estas exigencias, el Gobierno rechazó categóricamente que se pueda producir un cambio en la asignación de estos recursos, incluyendo una mayor contribución a las zonas desde donde se extrae la riqueza.

En el país se recaudan unos 1.000 millones de dólares al año a través de este tributo, de los cuales sólo 3 millones se le asignaron este año a la región para el financiamiento de iniciativas que promuevan la innovación y el emprendimiento. Según lo señalado por Jorge Órdenes, alcalde de Andacollo, la mayor parte de las comunas mineras tienen muy pocas posibilidades de acceder a estos fondos, ya que no cuentan con personal capacitado para cumplir con los requisitos de las postulaciones que son altamente complejas. Por ello exigen que el 5 por ciento de las ventas de las grandes mineras se les entregue directamente a los municipios donde las mineras desarrollan sus operaciones extractivas.

Al respecto, el ministro de Minería, Santiago González, precisó que "esto es difícil de implementar, porque el im­puesto específico a la minería cuando se creó, se definió que los recursos iban a estar destinados a la innovación y a la competitividad". De todas maneras, indicó que se está tramitando una ley en el Congreso "a través de la cual se van a definir con absoluta claridad cuál será el destino de estos recursos", pero aclaró que no es sencillo que el Estado pueda focalizar impuestos en forma directa a alguna región en particular. "Es indudable que la riqueza minera está acá en la zona norte, pero los impuestos son de todos los chilenos", sostuvo.

Ricardo Cifuentes, intendente regional, explica que "Chile es un país unitario, la gente de Aysén es chilena al igual como la de Antofagasta", por lo que el criterio es distribuir los recursos de manera homogénea.

González, de todas maneras abre una puerta a los anhelos de los municipios al señalar que "indudablemente nosotros como Ministerio de Minería creemos que los recursos para innovación y competitividad de preferencia tienen que ir a las zonas mineras", pero con la salvedad de que únicamente se destinen a zonas vinculadas a esta actividad económica. Sobre este punto, el intendente Cifuentes recuerda que las regiones mineras ya "tienen un beneficio adicional", ya que "el royalty privilegia a las zonas mineras por sobre las que no lo son".

MEJORES INICIATIVAS.

La máxima autoridad política de la región añadió que lo importante en esta discusión es ver en qué se utilizan los recursos disponibles. A la fecha de los 1.600 millones de pesos asignados a la región a través del Fondo para la Innovación y la Competitividad, financiado con dineros del royalty, sólo 221 millones se han asignado oficialmente. En la zona, según lo estipuló el Gobierno Regional, este fondo debe ser distribuido en proyectos evaluados a través de Conicyt, las universidades y Corfo. Carlos Álvarez, vicepresidente ejecutivo de esta entidad fue enfático en señalar que acá no sólo es relevante "tener la plata, sino que también buenos proyectos", siendo éste un aspecto crítico que debe ser superado por la región.